Al buscar en el DRAE el significado de este verbo, se nos remite a otros muy similares: auxiliar y socorrer o cooperar. También aparece la siguiente definición: "Hacer un esfuerzo, poner los medios para el logro de algo”. Ésta nos lleva a deducir que ayudar requiere realizar una acción, hacer algo. Cada vez que pensamos en ayudar a alguien, se nos ocurren mil acciones que podemos emprender para socorrer a esa persona, para cooperar en la solución de lo que consideramos su problema, ahora ya convertido en nuestro, pues deseamos ayudar o se nos ha pedido ayuda. Ahora bien, ¿es eso realmente lo que significa ayudar? ¿Cómo sabemos que alguien nos está pidiendo ayuda y no compartiendo sus pesares como forma de desahogo? ¿Hemos considerado como posibilidad de ayudar la pasividad y la renuncia absoluta a actuar?
Todas estas preguntas abren muchos más interrogantes: ¿Cuándo debemos optar por prestar ayuda y cuándo por retirarla? ¿Somos los más indicados para ayudar a la persona que nos parece necesitara ayuda? ¿Quién decide quién necesita ayuda y quién no? ¿Podemos ayudar a alguien que no desea ser ayudado: es eso ayudar o controlar? ¿Dónde está el límite entre la ayuda incondicional y la manipulación cooperativa?
Hoy no quiero emitir sentencias, sino abrir interrogantes, buscar vuestras opiniones sobre este tema. He hecho trabajo voluntario en varias ocasiones y tengo una opinión muy concreta sobre este asunto, pero me gustaría conocer vuestros puntos de vista. Animaos e intentad responderme.
Buen tema DRuida.
ReplyDeleteTuve un jefe que decía: "Si en algo me aprecias, no me ayudes." Yo lo entendí muy bien.
Creo recordar que fue Diderot el que dijo: "Si quieres ver a un hombre feliz, no te metas en sus asuntos."
Creo que con estas dos frases reflejo mi manera de ver lo que tú planteas. No obstante hay matices y trataré de contestarte a alguna más de tus preguntas.
Lo que también te digo es que, desde pequeño, cuando oigo aquello de... "hazlo que es por tu bien", como un resorte, me pongo en guardia.
Hoy no quiero ayudar, quiero imponer: ¡Sed felices!
Ay, D.Ruida, esto "me ha llegao". Estamos montando un armario de Ikea en casa y hay que ver cuanto me cuesta explicar al "contrario" que cuando suelto un taco es para descargar mala leche y no para que me agarre el destornillador y me termine la faena.
ReplyDeleteMiércoles: ¡no puedes ni siquiera imaginar cuanto te entiendo con lo del destornillador!
ReplyDeleteDemián: Tuviste suerte, pues a mí mi jefe me decía: "no me vengas con problemas, tráeme las soluciones"
DRuida: creo que lo que planteas no es sencillo, pues, dependerá, entre otros factores, del grado de proximidad de la persona que pide o necesita tu ayuda. También será diferente según la causa de esta necesidad.
No creo que haya "sentencia" generalizada. Lo que sí tengo claro es que, sea como sea, es muy deseable que se respeten la intimidad y la libertad del "ayudado" y, fundamentalmente, del "ayudador".
1.- No creo que nada en este mundo pueda ser incondicional.
ReplyDelete2.- El simplemente escuchar el desahogo de otras personas, ES AYUDA.
3.- Al que no quiere ser ayudado, también indirectamente se le puede ayudar.
4.- Hacer que otras personas piensen, también es ayuda.
5.- Debemos retirarla cuando reiteradamente no se nos acepta.
6.- El pedir ayuda puede a algunas personas hacer que sientan vergüenza.
7.- Mostrar el camino, es forma de ayudar.
8.- ¿Recuerdas la parábola del buen samaritano?. La pregunta del millón, ¿quién es tu prójimo?.
9.- No debes prestar ayuda al que pretenda aprovecharse de tí.
A Demián: Ya lo creo que hay matices en el tema de la ayuda y eso sin meternos en temas concretos.
ReplyDeleteMiércoles: A veces se agradece la ayuda sin pedirla; hay gente que no sabe pedir ayuda, pero para eso está la comunicación, para evitar meterse en los asuntos de nadie, como dice Demián sin permiso, pues entraríamos en el terreno de la manipulación. Y es que una persona que no sabe decir: no necesito ayuda, tampoco sabe decir: detente, que me controlas la vida.
Aire: Ya lo creo que no es sencillo; precisamente por eso lo he planteado. Haciendo trabajo voluntario, aprendí que extender la mano en señal de ayuda es ayudar; levantar a la persona del suelo con mi mano es impedirle a la persona tomar su propia decisión entre ser ayudada o no. En última instancia, si una persona necesitada no quiere ser ayudada, en mi opinión, se debe dejar, o estaremos coartando su libertad.
ReplyDeleteJosé Porto: Estoy totalmente de acuerdo con los puntos 2, 4, 5, 6 y 7. En mi opinión, el término "incondicional" tiene mucho que ver con la intención o el propósito de la ayuda, pero esto daría mucho que hablar.
ReplyDeleteLos puntos 8 y 9 están relacionados. Si podemos ir más allá de las formas y no juzgar los actos de las personas, sabremos encontrar el prójimo en todos los seres e incluso ayudaremos a los que se intentan aprovechar de nosotros, pues si se intentan aprovechar es porque están necesitados de algo. Una persona que no necesita nada, no tiene la necesidad de aprovecharse de nadie; ya lo tiene todo.
Simple: ayuda al que te pida ayuda, jamás ayudes porque que tu creas que necesitan ayuda. Puedes salir herido.
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