El Mundo Today

2010/02/26

A simple, well-intended piece of advice for hunger-striking dissidents



If you wish to attract First-World pity, beware of one inescapable fact: the moral superiority of the Left, especially our modern, democratic, equalitarian left of freedom and citizenship. No matter who you are, we are better than you. Why else would we want to save you? No matter how unfair you may think your imprisonment was, do not question the fact that we are morally superior. We know because that's the way we feel when we go to bed. If you ever invoke Liberty, it should always be collective. Do not ever invoke individual Liberty. Didn't you know that is right-wing, frankly bourgeois? The same goes for insulting a sacred cow like Castro ("Fidel", to us). Touch not our beloved commander, since this sad mistake may and will turn the sorriest victim into an aggressor. Against our faith, our myths, our religion. How dare you attack the theme park of our utmost fantasy of social justice (for "The World", mind you, not for you)? Didn't anyone tell you that everyone is good until they are corrupted by a repressive education? I hope you're not saying the holy Revolution that freed you from dictatorship is in any way wrong or unfair. Please do not make it so hard on yourself, and us. Specifically, we must insist, do not attack any icons of The Left. Remember that for us the Castros are a Che Guevara poster we like to masturbate against. Aaah! Bliss... Let socialist Paradise exist in that Tropical land of you funny people, even if we must sacrifice ourselves and live in capitalist Hell.
Failure to follow this simple, good-natured piece of advice --which is graciously and freely provided to you as a matter of pure, natural kindness from the bottom of our bleeding First-World, left-wing hearts--, will result in unfortunate consequences desired by no one. Suspicion will fall upon you and yours, you'll be subject to ruthless scrutiny. Your motives will be questioned, disbelieved, ignored. There'll be no glory in your sacrifice. No journalist will even tell us about you until you are, well, dead. No famous actor will make audiences cry by appealing to the freedom of your conscience. Not a snot will fall from the 20.000.000€ dome of the Human Rights and Alliance of Civilizations Chamber in the UN's Palace of Nations, while president Zapatero (who deemed the life of mass murderer De Juana Chaos "sacred") doesn't deem it fit to mention that you just died after starving for 85 days in defense of your dignity as a human being. We won't send to our mail list the kind of tacky PowerPoint presentations that touches our sentimental hearts. We won't form any Facebook groups to support your selfish, wrong, reactionary cause. You worm, exactly what did you think "Socialismo o muerte" meant? You'll die a lonely, cruel, miserable death. The tyrant's armed force will prevent your relatives and friends from even attending your funeral. No tourist will be disturbed while visiting the giant apartheid brothel your country has become since the freedom fighters liberated it from the yoke of capitalism.
That shall be your only fate. That is what invariably and inevitably will happen to you, you mulatto bricklayer, plumber, prisoner, if, oblivious to this well-intended piece of advice, you insist on hunger striking against the infantile notions of human justice and, above all, goodness dreamt by our left-wing religion.

2010/02/21

Rolando Toro y la Biodanza

Rolando Toro, creador de la Biodanza falleció el pasado 16 de febrero de 2010 a los 85 años de edad. El psicólogo, antropólogo y poeta, Rolando Toro, dejó como legado un sistema de integración humana, renovación orgánica, reeducación afectiva y reaprendizaje de las funciones originarias de vida conocido con el nombre de "biodanza".

La biodanza utiliza la música y el baile para integrar cinco funciones fundamentales de una persona: vitalidad, sexualidad, creatividad, afectividad y trascendencia. A lo largo de nuestras vidas todos desarrollamos estas funciones. Sin embargo, muchas personas "refuerzan algunas de ellas a expensas de las otras y rara vez expresan la totalidad de sus potencialidades, debido a los obstáculos encontrados en la expresión originaria de las mismas. La biodanza trabaja estimulando las funciones poco desarrolladas para poder integrarlas en toda su plenitud y armonizarlas con las otras." (Página internacional de Biodanza)

En los talleres de biodanza, se baila en solitario, en pareja o en grupo para explorar diversos aspectos del ser y descubrir algo nuevo sobre uno mismo.

Rolando Toro creó este sistema mientras trabajaba con pacientes de un hospital psiquiátrico de Santiago de Chile. Observó que ciertas melodías conseguían cambiar el estado de ánimo y la salud de ciertos pacientes y comenzó sus investigaciones en este área. Os dejo con esta fabulosa entrevista en "La belleza de pensar", donde explica cómo nació la biodanza y en qué consiste.

2010/02/11

Bienvenidos a Bulgaria


Abrumado por la avalancha de comentarios a mi entrada de hace dos semanas sobre el asesino sucesivo Dexter como epítome del orden, ayer pensaba imaginarme a un Antidexter o epítome del caos, cuando reparé en una pregunta hecha por Necronomicón comentando aquí otra entrada de hace meses. Por desmemoria no puedo contestarle, pero es él quien me ilumina a mí: anoche, al devolverle la visita encontré en su blog un sentido al enigma que no me dejaba existir. Me refiero a unos cartelones que había empezado a ver en las marquesinas de las paradas de autobuses cada vez que por pura obligación me aventuraba extramuros de los límites de mi código postal: desde el inquietante «Está usted en Bulgaria» al inverosímil «Está usted en Luxemburgo», pasando por el francamente provocador «Está usted en Grecia». Yes, we can.
Resulta que la gilip... digo el bonito proyecto multicultural en cuestión forma parte de la propaganda urdida por el Ayuntamiento de Santander, el Gobierno de Cantabria y la Fundación Marcelino Botín para promocionar la candidatura de «la Pozona» a Capital Europea de la Cultura (2016), en competencia con otras dieciséis ciudades españolas y nueve polacas. Como el banco de Botín acaba de registrar unos beneficios de 8.943.000.000€ en 2009 (un 0,7% más que el año anterior), espero que sea él quien adelante la pasta para apoquinar las primeras rondas de esta monumental chorr... digo «el nuevo concepto de Santadeuropa», que, según la propaganda con que nos asedian, nos permitirá «asumir una nueva identidad favoreciendo el intercambio cultural entre los países de la Unión Europea». Porque en España nadie tiene un duro; y casi menos que nadie, los Ayuntamientos, aunque eso no les impide asombrar a la UE a base de ingenio, salero y desparpajo, en plan de paletos sin fronteras. ¿Lo veis? Aquí, menos pasta, tenemos de todo.
Busco y hallo consuelo en las iniciativas emprendidas por nuestras competidoras en España, descubriendo alborozado que Santandeuropa no es ni de lejos la más descabelladamente estúpida. La competencia, como se ve, será durísima; pero como residente en el código 39004 de esta capital, aprovecho este blog para anunciar que por mí no quedará. Si me invitan a «participar en el juego», por Corocotta que participaré, sin regatearle un gramo de mi apoyo a esta panda de capull... digo nuestras dignísimas autoridades edilicias y demás cargos municipales (sin olvidar a las cargas, por supuesto).
El mapa de la utopía Santandeuropa que reproduzco copiado de Necronomicón es un delicioso ejemplo de caos, doblemente meritorio por basarse en la división de la ciudad en distritos postales, esa emocionante tentativa de orden. Sólo un despiadado funcionario municipal puede reunir la impasibilidad necesaria para perpetrar con ellos semejante desaguisado geográfico, haciéndolo además en nombre de la cultura. Hace falta estar muy acostumbrado a ver la capitaluca como un juego de Monopoly para atreverse a ubicar la isla de Malta no sé si en Monte o en Bolado. Claro que ¿qué han hecho los malteses por nosotros, aparte del famoso whisky de allí? Y Chipre, ni eso, así que ¡hala!, a Nueva Montaña, limitando al sur con Irlanda.
Indagando en la hemeroteca del Diario Montañés descubro que las banderas de los 27 países de la Unión Europea se izaron, con la pompa con la que en este país de mierda se hacen las mayores gilipolleces, el 2 de enero. Cuando ya tenía dormido el brazo de izar enseñas demasiado parecidas, dijo el señor alcalde: «Como alcalde vuestro que soy, sus debo una explicación; y esa explicación que sus debo, sus la voy a pagar», mientras miraba de reojo a ver si aparecía el coche de Mr. Marshall. Ya que no sabemos ni queremos hacer cultura, hagamos la pelota. Siempre fue más rentable. Luego pidió «la colaboración de los hosteleros para que ofrezcan en sus negocios algún plato típico del país cuya bandera ondee más cerca y así dar a conocer la gastronomía europea».
¡Ajá! Por algún sitio tenía que asomar el toque typical Spanish. Claro, claro, ya se sabe: por estos pagos la cultura es una tapa que te sacan con la caña. Para qué ir a Hungría pudiéndote comer un gulash lebaniego aquí mismo, en la bodega Fuente Dé, o donde mecagoendiós nos hayan colocado el parque temático del país magiar.
Eso sí: húngaras, suecas, checas, letonas... ¡ni una! Para que se fíe usted de los políticos.
De todas formas esto de las tapas alboroza mi ánimo; y ya he dicho que soy un entusiasta abogado de nuestra candidatura. Ni corto ni perezoso, me dispongo a dinamizar el intercambio cultural europeo de la mejor manera que conozco: abrevando. En mi bebedero habitual, sito en Bélgica, me aprovisiono de marihuana holandesa clonada en Ampuero ¿o era Entrambasaguas? Para que luego digan que en España no se investiga. Justo cuando me disponía a hacer un muestreo de la mercancía, me avisan de una inminente redada policial, no sé si relacionada con esta mamarrach... digo este crisol de civilizaciones. Afortunadamente, la puerta de servicio da a Lituania, y por ella me escabullo en cuanto recibo el agua, que por una vez llegó a tiempo.
De buena me he librado. En la Flor de Miranda, en vez del acostumbrado pincho de tortilla, solicito «alguna tapita búlgara». El camarero me manda diligente a tomar por saco. En Bulgaria somos así, muy nuestros. Les pregunto, en español, a dos damas que toman café a mi lado que qué tal escriben en cirílico. Me miran como a un zumbado. Pero uno conocido.
--¿De dónde sois? --insisto--. ¿Eslovacas, finesas, estonias tal vez?
--Yo vivo en Polonia [Peñacastillo] --responde la más joven--. Y doy clases de filo en Francia [Cueto-Valdenoja].
Estas elucubraciones inflaman mi imaginación. Mi vehemencia en apoyar nuestra candidatura es incluso excesiva, sobre todo teniendo en cuenta que mi c/Canalejas, de entre 27 países, ha ido a caer en la exótica España. Media hora más tarde, abrevando generosamente con mi amigo Galván y Galán en diversos bares de la antedicha calle, improvisamos un nuevo himno digno de nuestra nueva patria de todo a cien, asombro del mundo, que limita al norte con Bulgaria y al sur con Puerto Chico:

En España,
un pincho con su caña
es lo fundamental
para no vivir mal.
La ensaladilla,
que sea de hoy
porque, si es de ayer,
yo a otro bar me voy.

Lo cantamos a voz en grito con la mano en los ventrículos, emocionados hasta las lágrimas. Ni qué bonita es mi tierra ni hostias. Cañas y tapas. ¡Marchando! Eso, eso sí que merece la pena defenderlo cavando una trinchera de Portugal a Letonia, si es preciso.
¿Venía todo esto a cuento de algo? Pues no. Pero esta es una entrada caótica, con incisos, propensa a la divagación. El que quiera orden, que aprenda inglés, que precisamente por gobernarlo la barbarie sintáctica, necesita orden, represión, disciplina. Inglesa.
Español, españolísimo, es mi Antidexter: Caótico Fanegas. Ni en mil años habría sido Harry Morgan capaz de inculcarle código alguno. Y lo de ser asesino en serie, bueno, bueno... Habría sido una serie muy corta y nada seria. Ver a Caótico Fanegas descuartizando meticulosamente a nadie es más improbable aún que verlo ligando con persona, animal o cosa. Además, Caótico Fanegas no encaja ni con calzador en el perfil. Tampoco él fue objeto de abusos sexuales. Qué más quisiera; y quién me mandaría enchufar a mi ordenador portátil el TDT que me trajeron las Reinas Magas. Caótico Fanegas es un espejo del pueblo español.